Persiguiendo el sueño futbolero
A todos nos apasiona algo por lo cual luchamos para que sea realidad y Daniela Díaz Ortiz no está exenta de esto. Su amor por el fútbol empezó siendo nada más que un hobby, pero que después fue convirtiéndose en realidad; su gran inspiración es su Mamá. A la edad de once años empezó practicando otros deportes como el Baloncesto, pero lo que más añoraba era jugar fútbol, así que empezó practicando micro fútbol en el club Ferry donde una de sus hermanas jugaba allí ( Leidy ), allí jugaba como delantera, equipo cual dirigía el profesor Jesús Cáceres, quien después la llevaría al Atlético Bucaramanga, pero para ella no hay posiciones solo un objetivo, sumar y ganar. Daniela se caracteriza por ser una gran atleta y decidió practicarlo y le quedó gustando, luego se presentó a la Selección Santander de fútbol sala donde también actuaba como pibott o alera ya hace dos años, de ahí viene su posición en el campo actualmente, allí salió subcampeona en el torneo de la cancha marte y tres en el torneo de la revista Qhubo, ahí mismo en Selección jugó varios torneos locales, cuando iba a participar en los preliminares se lesionó y no pudo disputarlos.
Su profesor Jesús Cáceres le sugirió que por que no practicaba fútbol, la envió para que practicara con el Real San Andrés, ahí el profesor Omar Manrique le había dado la oportunidad para que la observaran y quedó para el proceso del equipo sub 20. Fueron años de gran crecimiento como persona, se formó de carácter, de no rendirse, hubo días que no veía que avanzaba, pero nunca se rindió y gracias a esos esfuerzos cumplió su sueño de debutar a los 19 años, hoy en día sigue entrenando para seguir cumpliendo sus sueños y metas. para Daniela cada profesor tiene su manera de pensar y ver el fútbol, pero su entrenador Omar Manrique, durante su paso por el Real, es un entrenador que le gusta el proceso y tiene su temperamento. Luego de que cumpla todos sus sueños a Daniela le gustaría jugar algún día en el Atlético Junior donde se encuentran también las jugadoras santandereanas Daniela Arias y Adriana Ojeda,la última con quién jugó en su paso por el Real San Andrés, a nivel internacional le gustaría jugar en España, específicamente en el Real Madrid, eso lo había respondido en una entrevista pasada, ya que es un país donde apoyan mucho el fútbol femenino, pero finalmente se inclina por el Ajax y su referente en el fútbol mundial es el defensor holandés del Liverpool, Virgil Vandijk, ya que ocupa también su misma posición en el campo.
Por último su paso por el Atlético Bucaramanga, su equipo del alma se dio porque habían convocatorias para ser parte del equipo 2019, ella se encontraba en ese entonces todavía con el Real San Andrés entrenando, su entrenador Jesús Cáceres en el club Ferry se contacta con ella y le dice que se presente a dichas convocatorias.luego de pensarlo tanto tomó la decisión de presentarse, allí pasó varios filtros y quedó dentro de 300 jóvenes que se habían presentado en ese entonces, eso fue muy gratificante para ella. Esta temporada para ella fue muy buena, llegaron varias jugadoras de experiencia que aportaron en el campo de juego, junto a las que ya estaban de las temporadas anteriores, tuvieron una buena temporada, lastimosamente no se pudo clasificar, pero es cosa de Dios, todas se estaban entrenando al 100%, les colocaron corazón , peor no se logró el objetivo.
Ya de su entrenador en esa temporada, el cual fue el profesor Víctor Hugo González, es un entrenador muy sabio, inteligente, de mucho carácter, además es un caballero lleno de muchos valores, en la actualidad Daniela se sigue entrenando con toda con el club, al igual que todas sus compañeras de equipo para que cuando arranque la temporada 220, la sigan dando al máximo junto a todo el plantel y nuevo estratega. El fútbol es una pasión, para los que amamos este deporte, para Daniela no es la excepción, así que ella se inclina por el delantero portugués Cristiano Ronaldo como el mejor jugador, más que por el astro argentino Lionel Messi, el actual jugador de la Juventus es su ídolo, aunque a ambos hay que disfrutarlos por igual mientras se pueda, ya que están a punto de terminar sus carreras deportivas, entonces hay que aprovecharlos al máximo.
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